Generación de 1956.
Look back in Anger la pieza de John Osborne a la que Terence Rattigan había negado posibilidades de éxito, se estrenaba el 8 de mayo de 1956 en el Royal Court Theatre en Londres. A partir el nombre de teatro quedaría unido a la una nueva generación de dramaturgos: John Osborne, Arnold Wesker, John Arden, Edward Bond….
Este año se formo un grupo teatral English Stage Company que componían personajes diferentes que querían alejar el centro cultural de West End. En un intento por renovación de teatro pusieron un anuncio solicitando manuscritos de autores desconocidos. Este concurso lo gano Look back in anger. Al final la compañía no fue tan renovadora. Aparte de Look back in anger durante la primera época se estrenaron 5 obras más de las cuales 2 fueron de novelistas reconocidos, 1 de un dramaturgo reconocido, dos de propios autores del grupo, Realmente única novedosa fuera la del Osborne, que en la época fue un autor desconocido. El estreno de la obra de Osborne no atrajo demasiada atención, pero el efecto fue fulminante, los llenos se sucedían. Y el protagonista de la obra se convirtió en le portavoz de una generación.
La ira pasó a ser un leit motiv de literatura inglesa. Tanto desde le punto de vista formal como temático esta obra no presentara una ruptura con los esquemas dominantes. La temática ya la ha tratado el Rattigan. Donde sí que presenta la diferencia con el well made plays es en la falta de progresión narrativa. En esta obra no pasa nada o casi nada. El tema esta centrado en la actitud del protagonista. Jimmy Porter – el típico rebelde sin causa, pero en una época de consenso político y progreso económico, la rebeldía conduce casi siempre a la pasividad o a la nostalgia. Así la rebeldía de Jimmy se traduce en mal humor y apatía como no tiene nada contra que revelarse.
Generación de 1956
En esta generación se piensa con ira y protesta pero también con nostalgia y rabia interior por falta de pasión en hacer las cosas y por vivir. Sociedad se centra en el trabajo, sociedad es una masa que se deja arrastrar, falta valor en las cosas, por eso miran hacia pasado imperial, en el cual si que hubo pasión y valores.
John Osborne
Era el máximo representante de la generación de 1956, al grupo de dramaturgos radicales de 1968 lo acusaron por venderse al Establishment, por no seguir con la misma rabia de Look back in Anger en sus siguientes obras. Pero hay que reconocer que teatro de Osborne ha mantenido una carga crítica orientada no solo contra la clase dirigente pero también contra el establishment laborista. A pesar de aureola política la que tiene Look back n Anger no hay olvidar que obra de Osborne está centrada en la vida privada. Algunos lo calificaron de anarquista de derechas, porque lo que lo interesaba más que un mundo igualitario era un mundo excitante, menos conformista. Su intenso individualismo se hace patente en poderosas figuras masculinas de sus primeras obras. En las siguientes obras Osborne pasa desde la ira hacia la nostalgia por el pasado imperial, por los valores nacionales. El progreso de la era moderna se ve en tecnología y en la estandarización de la sociedad, es la sociedad uniforme, pierde su identidad.
Temas de teatro de Osborne:
La complejidad y la frustración de la relación heterosexual, la crisis de hombre maduro, la supervivencia de un talento individual en una sociedad que estimula la mediocridad, y la afirmación del modo de ser inglés frente a las tendencias uniformadoras de la civilización moderna. Todo ello expresado con una agresividad verbal y una inventiva que son únicas en el teatro contemporáneo inglés.
Obras:
Look back in Anger
Esta obra presenta visión de la sociedad de momento como mediocre, en ella vemos reflejada la actitud de Angry Young men, aparentemente en esta sociedad no tendrían que estar descontentos.
Jimmy Porter es el representante de su generación de 1956, tiene los estudios universitarios, pero no los aprovecha, se dedica vender dulces en un establecimiento. Desprecia y quizá envidia a los otros que están contentos con su estado.
Jimmy vive con su mujer Alison, la cual se queda embarazada y tiene miedo de decírselo y con un amigo. En el primer acto Jimmy ataca la familia de Alison que es de clase alta y de política tradicional. Más tarde viene una amiga de Alison Helena una persona muy tradicional, la cual convence a Alison de que abandone a su marido.
Lo único lo realmente sucede en la obra es que Alison es substituida por la Helena. Mientras tanto Alison aborta y vuelve con Jimmy, se reconcilian. El final ralla lo ridículo, Alison con Jimmy juegan a ser ardilla y oso.
La nostalgia aparece con fuerza en dos obras de Osborne muy distintas entre si.
The entertainer
Patriotismo nostálgico y obsesión por la virilidad. Ve mujer como una amenaza para la virilidad y seguridad de hombre. En esta obra intenta superar las limitaciones formales de teatro realista y recurre a la tradición típicamente inglesa las Music hall. Las actuaciones profesionales del protagonista son parte fundamental de la obra, en una actualización del recurso clásico del teatro dentro de teatro. Se repite obsesivamente la idea que las cosas ya no son como solían ser.
West of Suez
Una familia británica pasa unas vacaciones en una colonia británica antigua – una isla de caribe. Protagonista de la obra, un escritor inglés es asesinado por nativos al final de la obra. Es un final simbólico, no significa final de una vida individual pero el final del imperio británico, final de la tradición inglesa. Vemos en Osborne la obsesión por revivir el pasado.
A Sense of Detachment
Es una obra que más se aleja del teatro realista. Como en una morality play los protagonistas no tienen nombre propio. Representa una parodia del teatro de lo absurdo, del teatro de confrontación y de participación. El lenguaje es muy duro, es una protesta contra la desaparición de una gran cultura, cultura inglesa y contra la falta de la pasión en la vida moderna.
The end of me old cigar
Combinación de los elementos típicos del teatro de Osborne: la presentación de personajes que son perfomers- actores profesionales y la obsesión por virilidad, la amenaza de mujer. La trama se centra en las filmaciones de los escarceos amorosos de personajes masculinos con poder, políticos, periodistas que forma parte de una conspiración feminista para derrocar poder masculino.
Arnold Wesker
Suele ir unido a la generación del 56, aunque Wesker Trilogy no se estreno en el Royal Court Theatre. A finales de los cincuenta a los Angry Young men se les aplico el calificativo de Kitchen sink drama. Era un calificativo despectivo hacía la referencia de que los protagonistas de las obras eran de la clase social mas baja. Pero si nos olvidamos del despectivo del nombre podemos encajar obras de Wesker en esta corriente, de hecho dos de las obras de Wesker empiezan con escena de una mujer fregando los platos.
Wesker es judio de origen ruso, de East End – lo contrario de West End(sociedad alta).
Refleja en sus obras la realidad laboral, tambien muestra el tema de los judíos, la realidad de Israel, como judío siente la necesidad de mostrar el tema judaico. Al final de su obra muestra su sentimiento de creciente odio hacia la clase trabajadora. Intentó acercar el teatro de calidad a la clase baja, pero se llevo una decepción, por lo visto la clase baja no sabe apreciar este tipo de teatro y prefiere el teatro comercial. Formo el Centro 42 – un intento pionero de acercar el teatro a las masas con ayuda de sindicatos. Fracaso al no conseguir la ayuda esperada de los sindicatos. El drama social de Wesker deja mucho que desear, el teatro de Wesker siempre tiene un componente humanitario y sentimental.
Trilogía
Chicken soup with Barley (1958)
Roots (1959)
I’m talking about Jerusalem (1960)
Tiene cierto carácter autobiográfico, época de su vida en la cual estuvo trabajando en el puesto de repostería de un hotel. Primera obra marca el tono de toda la trilogía, tras el entusiasmo inicial de protagonistas se produce el contacto con la realidad, y se acaba en un estado de resignada pasividad. La protagonista es la familia Kahn, judia. En Roots autor trata su obsesiva preocupación por la pobreza cultural de la clase trabajadora.
Kitchen (1959)
Se estrenó en Royal Court theatre.Igual como trilogía tiene elementos autobiograficos.
Combina aquí una presentación realista del trabajo en cocina con una clara intención simbólica. Es improbable que un restaurante atienda 2000 clientes al día, y el dueño es clara encarnación del capitalismo. La comunicación se ve dificultada por el trabajo y por el hecho que personal esta compuesto por varias nacionalidades. El diálogo se limita a una serie de comentarios triviales. La parte importante es la música casi siempre presente en el teatro de Wesker. Lo principal de la obra es el trabajo, actividad a veces frenética, de los personajes, relaciones entre personas, odio, amistad, amor etc. La esterilidad del trabajo en cadena se refleja en la vida biológica, una de las camareras aborta voluntariamente y otras tres también lo van hacer.
La única salida del universo cerrado de la cocina es la rebelión violenta de Meter, quien consigue paralizar la actividad del restaurante. Pero Meter es reducido, y al final de la obra Marango tiene la ultima palabra cuando se pregunta qué mas necesita un hombre que tiene trabajo, comida y dinero para ser feliz. Es la pieza más lograda de su primera época.
The Wedding Feast
Tema clásico del teatro de Wesker – la falta de autonomía y creatividad de la clase trabajadora. En esta obra Wesker ha querido demostrar la imposibilidad de una relación de igualdad entre empleados y jefes, pero por su incapacidad para dar expresión dramática a las ideas cae en una presentación tópica de los personajes. Igual como en la Trilogía los planteamientos políticos desembocan en un callejón sin salida: el trabajo industrial es por si deshumanizador, independientemente de quién posea los medios de producción. Wesker quizá quiso demostrar que sigue creyendo en la lucha de las clases, pero esta obra muestra una presentación de las menos halagadoras que han aparecido en los escenarios ingleses.
The Merchant
No es sino una versión de The Merchant of Vence, de Shakespeare, en la que personajes y argumento son esencialmente los mismos, aunque Wesker transforma la intención de obra al cambiar radicalmente a Shylock. El Shylock de Shakespeare era la encarnación de la avaricia y del afán de venganza, el Shylock de Wesker es un hombre vitalista y generoso. Presenta aquí el tema judio y tambien la persistencia del mal en el corazón de los hombres.
Harold Pinter (1930-)
Desde punta de vista cronológico encaja perfectamente en la generación de 1956, ya que escribió sus tres primeras obras en 1957. Sin embargo, frente el carácter explícito y fuertemente temático de las primeras obras de Wesker y de Osborne , el teatro de Pinter desde un principio ha sido muy reticente, lleno de vacíos pausas y ausencias.
Lo que sucede en las tres piezas del año 1957 viene a ser lo mismo: personajes situados en un lugar cerrado (una habitación, un sótano)mantienen conversaciones triviales hasta que aparece una amenaza indefinida que viene del exterior. El final repentino de la pieza impide ver la naturaleza real de la amenaza.
Obras:
The Room
THe Dumb Waiter 1957
The Birthday party
The Caretaker (1960)
Tema de territorio y perdida progresiva del poder, pero no como algo político sino como algo personal.
The Homecoming (1965)
Lo primero que llama atención en esta obra es el lenguaje, violento y desagradable. Representa relación sexual como violenta y explotativa, en esta obra es una mujer la cual domina a los hombres que la explotan.
Características de estilo de Pinter
Tiempos verbales en presente, oraciones cortas, mezcla de registros, crea una manera diferente para cada personaje así puede mezclar estos registros. Es una de sus mayores habilidades.
A pesar de su innegable originalidad el teatro de pInter representa una influencia directa de Samuel Beckett. Es un autor muy sorprendente a pesar de su conocida reticencia a dar opinión sobre sus obras con la Obra de Betrayal hizo un comentario que su vida personal se parecía a la de los personajes.
Kitchen – plot
The Kitchen es una obra coral sobre las personas que trabajan en la cocina de un gran restaurante. Hay hasta treinta personajes, pero la obra se centra sobre todo en tres líneas argumentales: el enfrentamiento de Peter con los chipriotas, la relación que mantiene con Monique y cómo ve su primer día en la cocina Kevin, un inmigrante irlandés.
Los personajes principales están exhaustivamente descritos por el autor, pero aquí sólo nos centraremos en los que protagonizan las líneas argumentales expuestas arriba. Peter, alemán, es un muchacho vehemente, que se deja llevar a menudo por sus pasiones, aunque esté descrito como “good-natured”. A lo lago de la obra se debate entre esa buena naturaleza, que le da destellos de poeta, como cuando pregunta a los demás por sus sueños pero es incapaz de encontrar el suyo (“I can’t dream in a kitchen!”, p.61), y su furia contenida por lo duro de su trabajo y el mal momento por el que pasa su relación con Monique. Finalmente, será esta faceta furiosa la que triunfe, en la escena final de la obra en la que abandona la cocina gritando y con las manos cortadas y sangrantes. El personaje de Kevin comparte en cierto modo su punto de vista con el del público o el lector: de asombro ante la velocidad a la que se desarrolla el trabajo y las relaciones humanas en la cocina. Tiene una inocencia que va perdiendo en un solo día, al final del cual es ya uno más.
Aunque se pasa toda la obra diciendo que se va a marchar de la cocina ese mismo día, al final se da a entender que se quedará por el dinero, como todos los demás. Monique es una mujer contradictoria: a veces parece frágil, como Gaston dice: “You’re like a bit of paper- the wind blows you about” (p.26); otras, es un personaje fuerte que se enfrenta a Peter: “Are you still sulking? It was your fault […], you’re just like a little boy” (p.57). Los demás personajes forman un trasfondo en torno a estos, comentando lo que ocurre (los pasteleros Paul y Raymond), dando impresión de que se trata de una ajetreada cocina real (las camareras), o causando vuelcos en la acción (el vagabundo, el señor Marango).
El espacio en la obra es único: la cocina del restaurante. Debe ser un lugar bastante agobiante, pues está atestado de personas y de enseres de cocina. El tiempo es también único: un solo día de trabajo en la cocina. Aunque obviamente no se puede representar en tiempo real, es lo que se supone que desea el autor, quien indica explícitamente en las acotaciones que le gustaría que no hubiera pausas entre los actos, aunque se supone que el primero es por la mañana y el interludio en el descanso de medio día.
Arnold Wesker divide la obra en dos actos y un interludio entre ambos. Cabría preguntarse cuál es la diferencia entre esto y la división en tres actos. En mi opinión, el interludio se diferencia claramente, además de por su mayor brevedad, por la menor cantidad de personajes que intervienen, y por el ambiente de intimidad que se crea frente al trasiego de gente, acciones y diálogos de los dos actos. Creo que es por ello que no se decide a llamar “acto” a este segmento intermedio de The Kitchen.
Se trata de una obra que sorprende por su complejidad, y en la que los personajes se comportan de forma muy humana y creíble, lo que sin duda contribuye al éxito que ha cosechado.